lunes, 13 de julio de 2009

MAQUINARIA PESADA INICIA OBRAS PARA BENEFICIAR A LOS TECUALENSES

LE GANAN EL ARRANQUE A LOS DE ACAPONETA.
La maquinaria valuada en casi 20 millones de pesos, ya inició una serie de obras para beneficiar al mayor número de pobladores. Los primeros habitantes en ser beneficiados en el emparejamiento de calles fueron los vecinos de Milpas Viejas y El Filo, donde las unidades recién adquiridas por el gobierno de Alberto Parra, busca limpiar calles y avenidas que presentan charcos y baches para mejorar la convivencia de propios y extraños que visitan estas localidades.En las primeras impresiones, el alcalde expresó que “esto es apenas el comienzo. Queremos llevarle a todos los poblados un poco de obras. Son muchos los años que han estado abandonadas infinidad de poblaciones, donde en cinco, diez y hasta quince años no se ha pegado una sola piedra. Están abandonados. Con esta maquinaria esperamos llevar un poco de obras y de progreso, de acuerdo a nuestras posibilidades, ya que el único limitante que tenemos es el consumo del combustible, pero veríamos la manera de compartir la obligación con las autoridades locales”.La maquinaria adquirida gracias a la gestión del alcalde Alberto Parra Grave, y a la intermediación de Guadalupe Acosta Naranjo y la diputada Sonia Noelia Ibarra, ya fue probada por personal, mientras que los propios conductores están a prueba para ver si cumplen los requerimientos y tiene la experiencia para manejar el quipo, sobre todo la motoconformadora, la retroexcavadora, el pailoders y los tres volteos. Está pendiente por llegar al municipio una camioneta y un bulldozer. (DCS Tecuala)

LOS DAÑOS QUE CAUSÓ LA TROMBA DEL SÁBADO

La fuerte tromba que en forma de fuertes vientos y pertinaz aguacero que cayó la noche del pasado sábado en la ciudad de Acaponeta, dejó decenas de árboles caídos, techos de teja en mal estado, tinacos que volaron y antenas de televisión que se doblaron; sin embargo los daños más fuertes se registraron en la parte norponiente de la ciudad, justamente por el rumbo del Estadio Municipal y la Estación del FFCC. Al decir de los vecinos del lugar, fueron gigntescos remolinos que amenazaron con afectar de manera significativa los bienes y aun la integridad física de los que por ahí habitan, de hecho, algunos vecinos de las antiguas casas ferrocarrileras, sufieron daños estructurales y muchas que tenían tejabanes o estructuras similares vieron con asombro y temor, como el viento las levantó como si fuera plumas. Una de las gigantescas lámparas del alumbrado nocturno del Estadio Municipal, se dobló y cayó sobre el techo del graderío, dejando fuertes pérdidas; y hasta la barda del jardín central se vino abajo. Las láminas que cubrían el techo de la vieja estación del tren, desaparecieron y se fragmentaron en millones de pedazos que como proyectiles volaron cientos de metros, por fortuna no se registraron personas golpeadas por estos objetos que cubrieron buena parte de la calle Aldama y la zona de Mazatlancito. Una barda de los almacenes de combustibles de la empresa Sierra Hermanos, también se derrumbó, así como decenas de árboles que cayaron sobre el cableado eléctrico dejando sin luz a buena parte de aquella zona de la ciudad. (fuente: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo)