jueves, 17 de diciembre de 2009

¿HABRÁ OTRA TUNDA?


Por Bartolomé Hernández.
Durante algún tiempo me pregunté cómo era posible que alguien de las pretensiones educativas y de las ambiciones sociales de Toñito Saizar fuera capaz de acomodar tremendas golpizas a su ex señora, ahora ya lo sé, él mismo define en la oreja de plana, del día de hoy, en El Eco, lo que significa ser un "animalito": Individuo de acciones instintivas, ignorante y grosero. No cabe duda de que también es un erudito.