martes, 10 de agosto de 2010

SUCEDIÓ EN ACAPONETA

Juventino Espinosa.
Por: Néstor Chávez Gradilla, Cronista Municipal.
En el año de 1911, fuerzas de revolucionarios partidarios de Don Francisco I. Madero comandadas por Don Martín Espinosa Segura (originario de Escuinapa, de padres y abuelos acaponetenses) llegaron al Territorio de Tepic por el sur de Sinaloa, entrando por Acaponeta, en donde se unió a las fuerzas del Gral. Baltazar Peña, logrando reunir entre ambos un poderoso ejército improvisado, mal armado y sin entrenamiento, ni disciplina militar; pero con una fiera e inquebrantable determinación de acabar con la dictadura porfirista. Entre ambas fuerzas, las de Espinosa y las de Peña, sumaron más de tres mil hombres. En su avance hacia el sur, lograron recuperar la plaza de Tepic que estaba en manos de fuerzas porfiristas comandados por el Jefe Político del Territorio Gral. Mariano Ruiz, el día 24 de mayo. Quizá Ruiz, quien defendía la plaza con 1500 efectivos, contra unos atacantes que le doblaban en número, hubiera podido hacerles frente y presentar férrea y tenaz resistencia; pero casualmente logró interceptar un telegrama que Espinosa envió a un general maderista que venía del sur en su apoyo con más de tres mil elementos y que llegaría de un momento a otro. Con esta información, Ruiz comprendió que sería por demás derramar sangre inútilmente, decidiendo entregar la plaza sin luchar, solicitándoles a los atacantes ciertas condiciones para su rendición.

DEL CABALLETE EN ACAPONETA A LOS MURALES DECORATIVOS EN BEVERLY HILLS

Por: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo
Acaponeta, conocida como la Atenas de Nayarit, tiene entre sus artistas reconocidos talentos también en las artes plásticas, Vladimir Cora, con renombre internacional; Nicolás Contreras Sánchez, destacado integrante de la plástica nayarita y otros más que vienen siendo conocidos en el Estado de Nayarit y tratan de abrirse paso en el difícil mercado del arte. Uno de sus más jóvenes exponentes es Néstor Chávez Pérez, mejor conocido como Tito, quien nace en el año de 1974 en Los Mochis, Sinaloa y es hijo del Cronista Municipal de Acaponeta, Néstor Chávez Gradilla y de la Sra. Pili Pérez de Chávez. Tito pasa su niñez y su adolescencia en Acaponeta, donde el plácido y relajante ambiente provinciano lo penetra e influye en su sensibilidad. Muy joven se entrega a dibujar y a pintar por su afán de satisfacer la urgencia de comunicación, además de que su padre y algunos otros familiares también han practicado la pintura y, considera que, de alguna forma influyeron en él.