lunes, 27 de abril de 2009

ENTREGAN AMBULACIA A LA CRUZ ROJA LOCAL

De izq. a der.: Daniel Goñi, Presidente de Cruz Roja Nacional, su esposa Isabel, Perla Díaz Tejeda, Juan Francisco Ealy Ortiz, Martha Elena González de Díaz López, Delegada Estatal de Cruz Roja, Lic. Juan Echeagaray Aguirre, Presidente del Consejo Local y el representante militar. Ney González y la mesa del presidium La foto del recuerdo, autoridades, donadores, socorristas y voluntarios Daniel Goñi, condecora a Juan Francisco Ealy Ortiz, propietario del periódico El Universal. Posando junto a la ambulancia donada que lleva el nombre de Perla Díaz de Ealy, vemos a la propia acaponetense, la Sra. Sharo Mejía de González y la Sra. Isabel de Goñi. Moderna y muy equipada ambulanciaDía de fiesta fue para la Delegación Acaponeta de la Cruz Roja Mexicana, el pasado lunes cuando el Gobernador del Estado Lic. Ney González Sánchez, fue testigo de calidad en la entrega de una moderna ambulancia totalmente equipada que la Cruz Roja Nacional, a traves del Presidente del Consejo Nacional de Directores de la Cruz Roja Mexicana Lic. Daniel Goñi Díaz, quien vino acompañado de su esposa Isabel, entregaron a la institución local. La gestión para este vehículo tan importante para Acaponeta, la hizo la bella acaponetense Perla Indira Samantha Díaz Tejeda, junto con su esposo el Lic. Juan Francisco Ealy Ortiz, quien es el propietario del periódico El Universal y gran amigo de este municipio. En el acto que se llevó a cabo en el patio trasero del edificio de la Cruz Roja en esta ciudad, estuvieron la esposa del Gobernador, Sra. Sharo Mejía de González; el Presidente Municipal de Acaponeta, Dr. Saulo Lora Aguilar y su esposa Yesenia Espinosa de Lora, así como el Presidente de la Delegación Acaponeta de la benemérita institución, Lic. Juan Echeagaray Aguirre, quien fue quien recibió las llaves del vehículo y la delegada estatal de Cruz Roja, Sra. Martha Elena González de Díaz López. Entre los visitantes distinguidos, destacó la presencia del Arzobispo de la Iglesia Ortodoxa Antioqueña de México, Sr. Antonio Chedraui. El Lic. Goñi Díaz, otorgó condecoraciones de la institución al Sr. Ealy Ortiz y a la propia Perla Díaz y mandó un mensaje de felicitación a la delegación Acaponeta, a los voluntarios y a todos los que hacen posible donaciones como la que ese día se dio. Al hacer uso de la palabra el Gobernador del Estado, expresó que ese tenía que ser un mensaje diferente por la situación en que actualmente se encuentra el país. Sin embargo, expresó, que Perla Díaz Tejeda, era una muy distinguida hija de Acaponeta, que no solo se acuerda de su pueblo en el decir, sino en el hacer y dijo: "Quiere a Acaponeta y me consta que lo dice en muchos lados, recibir este donativo obliga al gobierno del Estado a compartir el esfuerzo". Minutos más tarde anunció que en aproximadamente un mes más, regresará a la ciudad de las Gardenias a inaugurar el edificio de la Central de Bomberos de la región, asentada en Acaponeta, que incluyen un carro cisterna, un moderno auto escala de bomberos, otra ambulancia y un vehículo de rescate con quijadas salva vidas, lo que es una inversión compartida con el gobierno federal por 8 millones de pesos. Conminó Ney a la ciudadanía a cuidarse por la presencia en el país del virus de la influenza porcina: "La alerta en Nayarit debe ser la máxima y la asumimos cuidándonos a nosotros mismos, lo que significa al mismo tiempo cuidar a la familia, hay que seguir al pie de la letra las recomendaciones del sector salud, así tendremos un Nayarit fuerte y sano". Manifestó que en esta alerta nacional, retoma las palabras que viene repetiendo todos los días: "Hay que hacer la parte que nos corresponde y hacerla bien". Recordó el mandatario estatal a los presentes que no había que saludar a nadie de mano y menos de beso, que desde un día antes al aviso nacional de suspensión de clases en todo el país, él había tomado ya la desición de hacerlo en la entidad. Finalmente todos los que estuvieron en la mesa del presidium, como otros invitados, partieron a la Quinta Perla, por la calle Hidalgo, donde se les ofreció una comida.

RESEÑA FOTOGRAFICA (27ABRIL09) Continuación

RESEÑA FOTOGRAFICA (27ABRIL2009)

Reseña fotografica del evento, en Acaponeta, de entrega/donación de una ambulancia a la cruz roja local por parte de la Acaponetence Sra. Perla Diaz de Ealy, esposa de Juan Francisco Ealy Ortiz, presidente del consejo de admón del periodico El Universal. En el acto estuvieron presentes el Sr. Gobernador del Estado de Nayarit, Lic. Ney Gonzalez y su Sra. esposa Rosario de Gonzalez, asi como el presidente nacinal de la cruz roja Lic. Daniel Goñi Diaz, Destacó tambien la presencia del Arzobispo de la iglesia ortodoxa en México Don Antonio Chedraui y de la acaponetense Sra. Blanca Margarita Diaz Tejeda, Miss México 1979.

EL AMOR EN LOS TIEMPOS DE LA INFLUENZA

Por: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo
La llegada vertiginosa del virus de la influenza porcina a la capital de la República, nos hace meditar sobre la velocidad con que en estos tiempos se esparcen las cosas. Alguien tiene el virus en China, viaja a la Ciudad de México en un moderno avión, llega a un hotel repleto de turistas y empresarios, saluda al botones, al recepcionista, a la camarera, al mesero y ya hay un problema grave. De la misma manera, alguno de ellos sale de la ciudad de los Palacios y ya lo estamos viendo, llega a Monterrey, a España, a Estados Unidos, a Francia o hasta regresa a China propagando el mal en cuestión de horas a nivel global. Contra eso no hay defensa alguna. Imagine el amable lector, si un contagiado sube al metro o se mete a un cine.La enfermedad nos hace ver cosas que existen a nuestro alrededor, pero que por ser tan comunes, no las tomamos en cuenta. Primero esta alarma, no solo nacional sino mundial, ha provocado que la naturaleza del hombre estalle: los chismes y verdades a medias ya comenzaron a circular por la red y si no estamos predispuestos a considerar con seriedad lo que vemos u oímos, corremos el riesgo de vernos afectados: algunos andan ya diciendo que con tan solo ponerse un cubrebocas es más que sufiente para detener la amenaza. Craso error, esto es como el SIDA, entre más enterado estés por fuentes confiables, menos probabilidades tendrás del contagio o si, este se presenta salvar el pellejo. Otro punto que siempre sucede en casos de alerta nacional, es la desconfianza en las autoridades, nadie les cree ya nada. Siempre pensamos --y es que la burra no era arisca-- que nos ocultan información, que si los medios hablan de 10 muertos, hay que multiplicarlo por 10. Que el gobierno, en el nivel que sea, se maneja con negligencia y es que a veces, no los de arriba, sino los de abajo, se encargan de regar el tepache. Un ejemplo: me cuenta una señora que una de sus hijas, con los signos evidentes de un catarro común, decidió --y es que así lo quería su hija-- cubrirse con un tapabocas, por lo que decidió acudir a una farmacia para adquirir un par; pasó casualmente por la clínica del ISSSTE y pensó que ahí la iban a atender y proporcionar los cubrebocas. Un médico la atendió y prácticamente se burló de ella delante de enfermeras y pacientes, escupiéndole al rostro explicaciones no pedidas sobre la influenza. Con el sentimiento de haber sido tratada como idiota, la señora salió sin la protección mencionada, porque además no había. Más ética y amor a la profesión, señor doctor. Eso me lleva al título del artículo, parafraseando el nombre del inmortal libro de Gabriel García Márquez: "El amor en los tiempos del cólera", acá viendo lo que sucede, diríamos "El amor en los tiempos de la influenza" y es que ahora, prcaticamente está prohibido besar a otra persona y conste que no lo dijo el decimonónico alcalde panista de Guanuajuato, el dilecto Eduardo Romero Hicks, aquel que tuvo la puntada de prohibir so pena de fuerte multa, los besos en el tradicional "Callejón del Beso" en la colonial ciudad. Menos amor: dar la mano a alguien, hoy día te puede matar. Hasta el simbólico "dense fraternalmente la paz" de la misa, al menos por el momento pasó a la historia. Vamos, hasta el amor al cuerpo de Cristo, con la toma de la hostia se vio afectado, pues los sacerdotes lo dan en la mano del fiel y no directamente en la boca. Se le pierde el amor al fútbol, porque mire que un gol en las soledades de los estadios, no sabe a nada, es hueco, insulso e inicuo. Piérdale el amor a sus amigos y familiares, y si alguno de ellos tiene el virus, aléjese, indican las recomendaciones; aquellas imágenes románticas de una madre, llena de amor, arropando en su seno al hijo enfermo, no aplica en el siglo XXI; recuerdo una estampilla postal del paludismo, precisamente de una dama abrazando a su hijo y protegiéndolo de un gigantesco zancudo que se lo quiere chupar, lo dicho, solo imágenes románticas. El amor que le tenemos al prójimo --y sobre todo a las prójimas--, se ha perdido también; el instinto gregario del hombre, de andar siempre en bola, de ir como Vicente a donde está la gente, en los tiempos de la influenza, ya no es posible, ni se le ocurra acercarse a teatros, cines, parques de diversiones, discotecas, bares, restaurantes, estaciones de metro, estadios, conciertos, museos y todo aquello que atraiga a esas cosas hoy peligrosísimas que llamamos "gente". Las escuelas, de todos modos tan odiadas por los estudiantes --aquí dudo que haya amor--, permanecerán cerradas en el DF, Edomex y SLP. Por supuesto exagarados que son algunos, ya hablan de evitar comer la carne de puerco, porque dicen que la enfermedad proviene precisamente por comer tacos de cachete, lengua, buche, nana, oreja, cueritos y surtida, no le pierda el amor a un buen plato de tacuaches con nenepil, comer carne de puerco no lo infecta con el virus, este solo se da de persona a persona y por la vía aerea. Por cierto, los mala leche que nunca faltan, andan diciendo que los culpables de la epidemia son los políticos, por aquello de que el virus es porcino, incluso alegan que a ellos no les afecta y que por eso no suspenderán sesiones en la cámara de senadores. A la mexicanísima costumbre de escupir al piso o a donde vuele "el gallo", también le están llegando sus días finales, pues pronto, si esto sigue creciendo será penadísimo por la ley, tal como ocurrió en China, hace algún tiempo con la influenza aviar.Por otro lado, los casos que se están dando en los lugares donde se tiene el brote, nos hablan de la costumbre tan mexicana de ver la vida. Puro alegría y amor, aquí algunas anécdotas: en el Youtube, ya hay una cumbia de la influenza. Una directora de escuela se niega a cerrar su escuela y le vale maracas la protesta de maestros y padres de familia. Un juez en el Estado de México ha ordenado liberar presos de una cárcel para evitar hacinamientos y la posibilidad de contagios --¿de a cuánto habrá sido el viru$?--. Algunos hablan de un complot de políticos por ser tiempo de elecciones. Las peliculas en los videocentros o blockbusters en México, casi se agotaron porque la gente se quedó en casa viendo películas. Estornudar, toser o sonarse en público, algo muy normal y natural, puede ser usado en su contra y lo convierte en sospechoso, casi o más que el Chapo Guzmán. En algunos hospitales, la gente que iba a donar sangre o a hacerse análisis clínicos, mejor canceló, pues temen acercarse a los nosocomios, adios el amor al semejante. Otros por el contrario abarrotaron los sanatorios creyendo tener el virus --se apanicaron dijo Fox--. Ciertos alarmistas andan inventando que lo que sucedió fue que los narcos soltaron una bomba de microbios, o de bacterias, o de virus y que por eso no quieren que salgamos de nuestras casas para aterrorizar al gobierno. Se detectó también un inusual movimiento de gente abandonando la ciudad de México, no para salir a pasear, sino más bien huyendo de la influenza. Dice una nota de un periódico lo siguiente: personas que llevaban las manos sudorosas y también la frente, iban por las calles rogando y suplicando a Dios, que fuera el calor del clima lo que se sentía en la piel y no la fiebre de la enfermedad. ¡Qué barbaridad! Siento que el virus de la ignorancia está haciendo más estragos que el maldito bicho porcino. No nos dejemos llevar y todo esto sería muy gracioso, si no fuera porque ya hay muchos muertitos. Cuídese amable lector, más que nunca allá afuera y si nos vemos en la calle, desde lejos nos agitamos las manos... Abur. (Tomado de: PUERTA NORTE ACAPONETA: www.acaponeta.com)