Por:
José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo
DE
CHILE: Pues se nos fue el ínclito Don Arturo Fernando Zaldívar Lelo
de Larrea, nombre y hombre muy pomposo, ministro de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación (SCJN) y ex presidente de la misma, y que desde que
Andrés Manuel López Obrador, tomó el poder del país, este “digno ciudadano” se culiempinó al macuspano mandatario y casi puso
en bandeja de plata la cabeza de uno de los tres poderes de la unión, que es el
judicial; tal cual moderno Herodes, que entregó a Salomé la cabeza de Juan el
Bautista y le fue dada.
Zaldívar, en entrevista con Ciro Gómez Leyva, donde más hablaron sus expresiones corporales porque era evidente que se sentía incómodo, tal vez por una minúscula célula de dignidad escondida en un mar de tejido gangrenado por la falta de ética y que se puso a trabajar; antes de que le preguntarán quiso disculparse —muy a su modo— lo que debemos entender todos por “causa grave”, y es que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, esa que López Obrador quiere sustituir por otra que él, a través de Sheinbaum, le quede a modo a una fallida cuarta transformación; a la letra dice en el tercer párrafo de su artículo 98 del capítulo IX dedicado al poder judicial: “Las renuncias de los Ministros de la Suprema Corte de Justicia solamente procederán por causas graves; serán sometidas al Ejecutivo y, si éste las acepta, las enviará para su aprobación al Senado”.
Pero el Ministro de marras, ese que, junto con su jefazo el dueño de palacio nacional, pretendió alargar su período como presidente de la SCJN por dos largos años, para que, como noviecitos ir juntos de la mano a violar a doña Constitución lo que quedaba del sexenio, explicó lo que para él es causa grave y dijo: “Lo primero que voy a explicar es la cuestión de “causa grave”, hay quienes han salido de manera muy espontanea, sin algún argumento diciendo, no es causa grave. ¿Qué es causa grave? No es una causa trágica, ni de enfermedad, ni discapacidad. Una causa grave es importante, es trascendente a juicio del ministro que presenta su renuncia. Existe un doble filtro, el presidente y el senado deben aprobar”. Alegó el señor Zaldívar, que existe en México un régimen de libertades, un paradigma de los derechos humanos: que tenemos todos, y el ahora más, el derecho al libre desarrollo de las personas y la libertad de trabajo. Así de fácil se la sacó el “defensor” de la Constitución, simplemente a una interpretación del “interesado” —obviamente él—, sobre lo que es “causa grave” y vamos “pa´lante” como dicen los cubanos.
Comentó —eso sí— que se va a ayudar a la campaña de la Sheinbaum —finalmente
esta es su causa grave—, y que no busca un hueso para seguir royendo por
algunos años más, quizá, y esto lo digo yo: la fiscalía general de la república
o de “perdis” la secretaría de
gobernación. La única transformación que le veo a la 4T es una fuerte
involución que ya comenzó a juzgar la historia. Por supuesto, Zaldívar deja un
puesto que la dupla AMLO-Claudia querrán llenar con un títere más en la Suprema
Corte junto a las despreciables y vergonzosas Loretta Ortiz y la pasante de
derecho pirata sin parche en el ojo, Yasmín Esquivel, que, si pensamos en el
próximo año, la que parece que inevitablemente será la presidenta de este país,
Claudia Sheinbaum, tendrá que proponer cuatro ministros de la SCJN; consideren
que hoy su creador AMLO, tiene tres en el bolsillo, la suma, con Sheinbaum
serían siete, lo que es la mayoría calificada…dicho en cristiano, así como hoy
el presidente es dueño de dos de los tres poderes de la Unión, Claudia y su
creador, podrán ser dueños de todo. ¡Échate ese trompo a la una!
DE DULCE: El tema de Acapulco, es uno que se le ha salido de las manos al gobierno federal, que de manera inexplicable —o quizá muy explicable— rehúye que se le mencione ante la catástrofe y la tragedia; por ello no verán una sola foto del presidente Andrés Manuel López Obrador en el puerto, animando a la gente, caminando entre los escombros, ensuciándose los zapatos y visitando alguna de los miles de viviendas en ruinas. Como si se tratara de leprosos, AMLO evita que una foto lo saque de frente y detrás suyo el desastre, y eso que él mismo afirma que ha ido cuatro veces al puerto acapulqueño. La verdad, aunque se enojen sus más preclaros defensores, de parte del gobierno federal, y hay que recordar, que esta instancia es un solo hombre y se llama Andrés Manuel López Obrador, ha tenido una insensibilidad mayúscula ante esta desgracia provocada por la naturaleza, al grado que ni un peso de los 9 billones 066 millones de pesos, ni un quinto será destinado a Acapulco.
Llegó al extremo el dueño de palacio nacional de despreciar y prohibir que acapulqueños que venían a manifestarse en busca de apoyos en el presupuesto y de dónde sea, llegaran a las puertas de la vieja casa virreinal, hoy ocupada por el reyecito de Tabasco, llamándolos títeres manipulados por Xóchitl Gálvez, y eso que se pasa las mañaneras alegando que no se politice el problema de Acapulco. Y les echó a la policía. Hasta algunos diputados de Morena reclamaron airadamente esta increíble decisión. Por si eso fuera poco, al día siguiente de que pegó el huracán Otis en el puerto, se declararon 47 municipios en la declaratoria de emergencia, pero apenas unos ocho días después, solo se consideran 45 municipios, despreciando a 42 que quedaron a su suerte. Con todo, en un arranque más del paraíso Pejelandia, dice que los acapulqueños tendrán una navidad a todas margaritas y que ya mero abren quién sabe cuántos hoteles. ¡Vive Dios!
DE MANTECA: Se llevó a cabo el segundo informe de gobierno de Manuel Salcedo Osuna, y es como el arranque de la carrera electoral para gobernar para el período 2024-2027. Dicho de otro modo, al actual XLII Ayuntamiento le quedan a partir de hoy 310 días de vida. El chiste, que es el saludo más socorrido en estos momentos en la presidencia es al llegar a las oficinas: “¡Menos días!”
Por supuesto los partidos políticos y un buen número de aspirantes, comienzan a mover sus fichas, a hacer alianzas, a visitar vecinos, organizar desayunos, emitir encuestas, a convocar a grupos organizados y a platicar con los contrarios y los camaradas. Muchas veces sin contemplar lo que dice la ley en materia de reglamentos y leyes electorales, como la publicidad antes de tiempo, las campañas adelantadas, el uso de recursos ilícitos o aún lícitos, pero fuera de los protocolos y tiempos del INE.
En la calle, los corrillos municipales y los pasillos del mercado o la presidencia municipal, a bordo de las mesas de 80 x 80, se manejan nombres y más nombres, los más mencionados son: el propio presidente Manuel Salcedo, del que he oído en los últimos días que se va a reelegir, lo cual no es improbable, dado que se escucha también que el Ing. Francisco Piña Herrera, es el favorito del gobernador Miguel Ángel Navarro, por supuesto todos de Morena. Otro asunto a considerar y que provoca murmullos y rumores infundados es el tema de la paridad de género, por lo que hay que esperar a que alguien diga si aquí en Acaponeta toca un hombre o la presidencia va para alguna dama, y en ese caso, por parte de Morena, se menciona a Dora Cecilia Espinosa, actual secretaria de Bienestar e Igualdad Sustantiva del gobierno estatal, que competiría con alguien que lleva ya tiempo en la escalada por el mando municipal, como es la Profa. María Helena Ornelas Domínguez, la popular “Nenita”, síndica municipal, cabeza del partido verde en Acaponeta, pero a la vez, aliado de Morena, por lo que ya de por sí, ese hecho podría sacar chispas y dolores de cabeza.
Del PRI, PAN y los restos del
PRD, no se sabe si irán en la mentada alianza, primero porque no se sabe si todavía
existen en realidad. Las oficinas de los dos primeros “institutos políticos”
lucen cerrados y abandonados. Pero si me presionan por algunos nombres, hay que
mencionar al actual regidor Guillermo Guzmán Jiménez, priista de cepa y creo
que nadie más, porque antiguos y otrora notorios afiliados al ex partido
aplanadora, hoy están en las redes de Morena. Del PAN, no sé absolutamente nada
y ninguna cabeza visible. Partidarios de antaño y muy reconocidos miembros de
lujo de Acción Nacional, hoy ni pío dicen. Del PRD, o lo que queda de él, no se
sabe nada, hay que buscarlo entre los miles de desaparecidos. Por ahí resurge
el partido local, emanado del SUTSEM y su eterna líder Águeda Galicia,
“Levántate para Nayarit”, que ya anda sumándose a la Alianza por México, en
apoyo de Xóchitl Gálvez. En este partido milita el regidor Gaspar Tiznado, que
sueña con la “grande” municipal. Por MC, se autodestapa Anuar Abud, que emite
encuesta tras encuesta, de las que sospechosamente aparece a la cabeza de las
preferencias ciudadanas. Hay más nombres y golosos aspirantes, de los cuales
iremos dando cuenta y razón, pero destaca la presencia de un independiente que bien puede ser cooptado por alguno de los partidos hoy de oposición, me refiero a Héctor Algarín Espinosa. ¡Por hoy, un fuerte abrazo a los trabajadores del
Servicio Postal Mexicano, es especial a los carteros!
