viernes, 27 de marzo de 2009

$206,000 POR LOCATARIO DEL MERCADO DE ACAPONETA

Son más o menos 97 los locatarios registrados del Mercado Corona de Acaponeta, y si dividimos entre ellos los 20 millones que el Ayuntamiento les tiene prometidos, les toca de a $206,000 pesos por piocha, dinero que bien haría el Ayuntamiento en otorgarlos como préstamo a cada locatario, a pagar en 30 años, a bajo interés, para que cada quien haga con ellos la remodelación que mejor convenga a su negocio. Por lo pronto las conclusiones que hay en relación al asunto del Mercado son las siguientes: No será demolido, será remodelado. No hay proyecto aún, resultó falso que se había presentado ya al INAH.No serán 25 millones, la promesa bajó a 20 millones. Los 20 millones no están seguros ya que son recursos que no se han solicitado. No se ha invitado ni consultado a los locatarios sobre la remodelación del Mercado. El método para consultar e informar a la sociedad no ha sido el correcto, existen diversos medios de obtener información, el cabildeo con los involucrados, que permite sondear la factibilidad de llevar a cabo las acciones, las encuestas de forma directa, a través de las cuales se determina el porcentaje de la comunidad que aprueba o desaprueba las acciones, finalmente, los Foros de Consulta Popular, en los que se establecen mesas de trabajo, con la participación de autoridades doctas en la materia o acciones a ejecutar, organizaciones sociales, los comerciantes, investigadores en los temas a tratar, público en general interesado, quienes son convocados a través de los medios de comunicación y de forma directa. Luce poco serio que de la noche a la mañana, la admón. municipal lance la noticia de que va a remodelar el inmueble del mercado municipal y que dicha remodelación tiene un costo de “X” millones de pesos, se pregunta la sociedad: ¿estos proyectos están contemplados en el Plan de Desarrollo Municipal? ¿En el Programa Anual de Obras Públicas del Municipio, aprobado por el H. Cabildo?, ¿Estos recursos están considerados en el presupuesto anual?, ¿Se cuenta con los estudios socioeconómicos y de impacto, para determinar la viabilidad de dicho proyecto?, ¿ Se tienen los permisos correspondientes? ¿Se tienen las corridas financieras para determinar el costo de cada metro cuadro de espacio comercial y la recuperación de la inversión? ¿Están de acuerdo los locatarios en aportar el costo por reubicarse temporalmente? No se tiene fecha de para cuando arrancan las obras de remodelación. Los encargados municipales actúan como mago de feria, sacando de la chistera las sorpresas que se tienen preparadas para el público, en lo que dura la función (administración municipal) Conclusium conclusiorum: esperamos que no nos dejen "comiendo camote" con lo de los 20 millones, pero si nos dejan, pues que sean de "Camotes Juárez", esos si son buenos. O como dijo Cesar, el del puesto donde se vende desde un alfiler hasta un tractor: ¡Todo se puede, nomás que los locatarios estemos de acuerdo!

EL PERIQUITO DE MARGARO GUERRA ¡AGUA DE CEBADA!

Don Margarito, un hombre que vendía agua de cebada en su natal Acaponeta y que para deleitar a su clientela contaba fantásticas historias producto de su desbordada imaginación, era un hombre ya entrado en edad, color blanco de ojos azules y no menos de un metro ochenta centímetros de estatura, encorvado pero todavía visiblemente fuerte, apenas comenzaba a instalarse y ya la gente se paraba a su alrededor, decía Margarito: en mi casa tengo un perico muy listo, me ha dado a ganar mucho dinero el animalito, todos los días lo alquilo en los velorios y novenarios pues es muy bueno para rezar el rosario, no se cansa de repetirlo, se sabe tambien todas las letanias, ¡Agua de Cebada! Una vez llevé este Perico para el rumbo del Palmar que está allá por Tuxpan, al andar por ahí, se me perdió mi Periquito, duró perdido varias semanas, por más que lo busque no lo encontraba, hasta que me van diciendo que por las mañanas los jornaleros que pasan por el Palmar escuchan que las parvadas de pericos que ahí anidan comienzan desde muy temprano a recitar: Santa Maria Madre de Dios... Ruega por Nosotros. -oyen que contesta otro grupo de pericos, a jijos, me dije, ahi debe seguir mi periquito, ya le enseñó a hablar a los demás. Voy por él. Lo encontré y me lo traje de vuelta para la casa. ¡Agua de Cebada! Ayer salí muy temprano de mi casa, me fui al monte a cazar venado con mi viejo rifle, de esos que se retaca la pólvora con una varilla, creo que les dicen "mecheras", al llegar a una laguna que veo a un venado tomando agua, ni tardo ni perezoso le apunté y ¡pum! Disparé. De pronto que me doy cuenta que no había sacado la varilla del rifle, el venado cayó muerto al instante, atravesado por la bala y por la varilla, la bala le dio en el mero corazón, y la varilla le atravesó el pescuezo, al salir yo a recuperar la varilla al otro lado de la laguna, antes de llegar al árbol donde estaba incrustada la varilla, escuche como que aplaudían, !ah jijos¡ y quien me aplaude me pregunté, pues no era otra cosa más que cuando disparé, la varilla salió en vuelo directo hacia el venado, lo atravesó, así como la laguna, pero al pasar por la laguna, entro al agua y paso llevándose cuatro mojarras de más de un kilo y al moverse entre sí, se escuchaba como que aplaudían, este es mi día me dije, ni tardo ni perezoso jalé la varilla para arrancarla del tronco del árbol donde estaba enterrada y cuál fue mi sorpresa que empezó a brotar miel del agujero, había dado con un panal entonces que saco una bolsa que llevaba y recogí la miel que la naturaleza tan amable me regalaba, cuando guardé la bolsa con miel, me dispuse a limpiarme las manos con un poco de hojarasca seca que había por ahí y menuda sorpresa me voy llevando, al agarrar las hojas, también pesco a un conejo por las orejas, lo metí al morral y regrese bien contento a mi casa con venado, mojarras, miel y conejo. ¡Agua de cebada! Continuará…