Querido Elector:
Soy
tu próxima boleta electoral, todavía no conozco los nombres de quienes
aparecerán impresos en mí; será hasta que esté en tus manos cuando juntos
sabremos quiénes serán los candidatos y el partido o la alianza que cada uno de
ellos representa.
Cuando
me recibes soy sólo un papel impreso, la vida me la das tú al momento de
márcame con una cruz o una raya, es entonces cuando me conviertes en tu voto.
¿No
es para ti querido elector una maravilla poder transformar un papel en voto?
Por
eso debes de ser cauto y responsable, pues en tus manos queda el destino de tu
pueblo. Muchos hombres y mujeres han muerto luchando para que tú puedas votar;
todos ellos desde su trinchera y su entrega lograron lo que hoy te permite elegir
a tus gobernantes: el voto. No los traiciones, no traiciones a tu Patria.
Escucha
con respeto y atención a todos los candidatos y dales la oportunidad de que se
acerquen a ti, eso no compromete tu voto, el hablar con ellos y recibirlos
respetuosamente en tu casa o colonia en nada te perjudica, tú sigues siendo
libre de elegir en secreto a la persona
de tu agrado. Estimúlalos a ser mejores y pídeles a todos que cambien su
conducta política, que ya no den espectáculos tan denigrantes, hazles saber que
la sociedad está decepcionada y molesta con su actitud.
Pero
hay algo más importante para ti, siempre cuida tu dignidad, respétate tú mismo
y hazte respetar por aquellos que solicitan tu voto. No lo obsequies, mucho
menos lo vendas, eso le hace daño al país, nos hace daño a todos.
En
la lucha por ganar el poder escucharás otra vez promesas y más promesas,
campañas fastidiosas, discursos vacíos, oirás vulgares dimes y diretes, ensuciarán
las calles y te ofrecerán esto y aquello, buscarán meterse en tu conciencia de
una y mil formas. Tratarán de apropiarse de tu corazón.
Pero
ante todo cuida tu libertad, ese Don sagrado que te hace hombre o mujer de
valores y auténtico ciudadano. Toma las campañas como una diversión, como un
festejo, pero en el momento en que me tengas en tus manos para decidir en quién
confiarás el destino de tu pueblo, no olvides marcarme con mucha
responsabilidad. Quiere a tu Nayarit, quiere a tu familia, siembra bien tu
futuro.
Gracias
por permitirme hablar contigo.
ATENTAMENTE
LA BOLETA