Por: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo
Recuerdo que en el año 2009
sepultaron en esta ciudad de Acaponeta, al Sr. Antonio Maldonado Ureña, quizá
su nombre no nos dice mucho, porque todos lo conocíamos como “el cuetero”,
personaje que se dedicaba a la elaboración de toda clase de artículos
relacionados con la pólvora y los fuegos de artificio, lo mismo un atractivo
castillo, que un bombillo para asustar viejecitas y alegrar a la muchachada.
Con la muerte de Don Antonio; el “cuetero” pues, se va también un oficio
milenario que comenzaron los chinos en épocas ignotas y que de alguna manera
continuó este personaje al que, en esa ocasión, dijimos adiós para siempre.