domingo, 9 de junio de 2024

DE CHILE, DE DULCE Y DE MANTECA


 


Por: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo

DE CHILE: Mucho hay que decir sobre lo que sucedió en la pasada elección que dio como ganadora —de manera arrolladora y contundente— a Claudia Sheinbaum Pardo, porque se habla de una diferencia impetuosa de 19 millones de votos, lo cual no puede, de ninguna manera ser revertido por una ilusoria e inútil impugnación por parte de Xóchitl Gálvez y su gente. Sí, estoy de acuerdo, seguramente hubo —siempre ha sido así— trampas por todos lados e innumerables casillas por todo el país. Sí, fue desigual la campaña —larguísima, por cierto— teniendo Morena como coordinador o jefe de campaña al propio presidente Andrés Manuel López Obrador y los recursos económicos del erario. Sí, se anotaron un golazo desde que mandaron el mentiroso mensaje de que de ganar Xóchitl se acababan los programas sociales, principalmente el de los viejitos y no hubo una respuesta oportuna y decidida que revertiera esa mentira que se tragó completita el pueblo.

Para su servidor, no hay nada que agregar, 19 millones de razones que llenaron las urnas, ya que, al momento de escribir estas letras y llevando el conteo distrital el 99.8% de las casillas computadas, el resultado era así: Claudia Sheinbaum: 35 millones 854 mil 890 votos; Xóchitl Gálvez: 16 millones 464 mil 689 votos; el otro, impresentable Máynez, ni debería mencionarlo, pero obtuvo 6 millones 192 mil 401 sufragios, suficientes para que el dueño absoluto de Movimiento Ciudadano, ese diablo llamado Dante Delgado, siga mamando de esa gran ubre, excelente negocio que es tener un partido político en su patrimonio personal. La diferencia porcentual entre ambas candidatas subió hasta un 32.3%. Contundente, fue, sin duda, el derrumbe de un sistema político que se paraba sobre palitos.


Lo cierto, es que, como dije al principio, mucho hay que decir sobre lo que sucedió, porque es claro que hay un cambio de régimen con un partido hegemónico, que habrá de desaparecer al PRD, ya viejo, obsoleto y caduco. Estamos comenzando a ver la agonía del otrora todopoderoso Partido Revolucionario Institucional, lo que nos lleva a plantear lo que tanto dijo su servidor a lo largo de este desastroso sexenio lopezobradorista: me parecía un error la inefable alianza del PRI, PAN y lo que quedaba del PRD, queriendo hacer frente a la aplanadora de Morena, siempre lo dije, era como mezclar, agua, aceite y un litro de pulque. 


Esa coalición, tronó como chinampina, primero por esa razón química de no poder mezclar, recordando a mis maestros en la prepa que me dijeron: “que el aceite es una sustancia no polar y tiene una densidad más pequeña y las partículas del agua no permiten que las partículas del aceite entre en ella, por ello vemos como se marca con claridad el límite entre el aceite y el agua”. O sea, imposible mezclar. La derecha, no comulga con la izquierda y menos, teniendo como líderes de los partidos a verdaderos sinvergüenzas como el ladrón Alito Moreno; el “simpatías” Markito Cortéz y el talegón de Jesús Zambrano, quienes lo primero que hicieron fue mandar a la pobre e ingenua Xóchitl a Chihuahua a un baile o a la guerra sin fúsil mientras estas lacras corrían a hacerse de una senaduría plurinominal y asegurar su inane supervivencia política.

Al parecer nadie reparó nunca, que el pueblo de México estaba hasta la madre de las transas viejísimas del PRI, la traición y ambición del PAN y lo desfasado y caduco del PeRDeré. La Señora Gálvez, se dejó mangonear por estos y otros sátrapas de la grilla nacional, cuya reputación está sumergida muchos metros bajo el lodo y sacaron de la manga un optimismo que los hacía acreedores del favor del voto de los mexicanos. Así les fue.

 


DE DULCE: Con el triunfo de Claudia Sheinbaum, comienzan los rumores y la especulación sobre las personas que habrán de integrar el gabinete del nuevo gobierno de Morena. Varios amigos, me comparten un documento donde viene un probable gabinete. Ignoro si es real y oficial, pero lo comparto con ustedes: Secretario de Gobernación: Martí Batres, actual jefe de gobierno de la CDMX. Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales: Dra. Marina Robles García, experta en ecología; Lic. Quiahuitl Chávez, encabezaría la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, ella es actualmente la subsecretaria de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, por lo que repite y sube de puesto; Lázaro Cárdenas Batel, Secretario de Energía, con un historial familiar que nadie tiene en el ámbito político, él fue gobernador de Michoacán. Susana Harp, quedaría en la Secretaría de Cultura, es miembro de la Asociación Cultural Xquenda, A. C., organismo que tiene el objeto de fomentar y promover la cultura, además de ser reconocida cantante y tiene una maestría en Programación Neurolingüística. Hoy es senadora por Morena. La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural quedaría en manos del Ing. Julio Antonio Berdegué Sacristán, con arduo trabajo en la FAO y la ONU. Nos llega oxígeno puro saber que, en la Secretaría de Salud, no queda el Dr. Muerte Tarugo López Gatell, sino el médico David Kershenobich, galeno de prestigio.


JUAN RAMÓN DE LA FUENTE

Por su parte Andrés Lajous, hoy secretario de movilidad en la capital del país, sería el nuevo secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes. Uno de los grandes personajes que rodean a la Sheinbaum, es el Dr. Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la UNAM, personaje clave que podría ocupar la Secretaría de Relaciones Exteriores y no como muchos creían que podría ser Marcelo Ebrard, al cual algunos expertos sitúan en la Secretaría de Economía. En turismo, la abogada y empresaria Altagracia Gómez Sierra, y en Educación, la académica y científica Rosaura Ruiz.


OMAR GARCÍA HARFUSH

Alguien cantado desde el principio Omar García Harfuch, a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y, repite Rogelio Rodríguez de la O, en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Tatiana Clouthier, muy cercana a AMLO, ocuparía la Secretaría de Bienestar. Cierro con Roberto Salcedo, probable futuro Secretario de la Función Pública, él es licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública y cuenta con más de 40 años de experiencia en el servicio público. Es el actual secretario de la Función Pública, por lo que estaría repitiendo.   

Esperemos que estos probables funcionarios u otros, no pasen a la historia como los secretarios de estado con López Obrador, que no podían abrir la boca y algunos pasaron por este sexenio como simples macetas de adorno y que solo asentían a lo que su patrón y creador les mandaba…tan abyectos y lamebotas como los legisladores de Morena en ambos congresos.

DE MANTECA: Atribuyen al argentino Juan Domingo Perón la frase de: “el pueblo no se equivoca nunca”, y —con mis serias dudas— alguna vez lo creí, pero ahora reculo, diría hoy: “buena parte del pueblo sí se equivoca y hasta riega el tepache” y no lo digo por el triunfo inobjetable de Morena y AMLO en todos los frentes, aunque no me explico que, siendo la clase media tan vapuleada por el presidente tabasqueño, tan insultada y discriminada, le dieron millones de votos. Cosas de la democracia.

Más bien me refiero a la sorpresa que me causa saber que 85 mil personas dieron su voto al caco Nacho Flores, y otros cuatro mil al raterillo —ese que robó poquito— Hilario Ramírez “Layín”, es decir, esos despistados le dieron permiso al par de ratas a robar a su antojo, sin saberlo o a conciencia, se convierten en cómplices.

Cuesta trabajo saber que Sergio González “el pipiripau”, ganó en
Santiago Ixcuintla, Nayarit…o “pior” en la vecina Tecuala, arrasó la esposa de ese sinvergüenza de Gabino Jiménez Huerta, luego del desastroso gobierno municipal que incluso lo llevó al bote. El mismo caso, pero a nivel nacional, se dio en Morelos, donde ganó Morena, a pesar del totalmente ineficaz gobierno del payaso mamón Cuauhtémoc Blanco.

Hay cosas inexplicables, un ejemplo de esos raros: el gobernador mejor evaluado en el país, era Mauricio Vila Dosal del PAN, y el peor fue el “cinco” (sincu-ello) Cuauhtémoc Blanco, del Partido Socialdemócrata de Morelos, una rémora del partido en el poder, y en ambos casos ganó Morena. Dijera el tal Derbéz: ¡Qué alguien me explique!