UN BREVE COMENTARIO A LAS MAL LLAMADAS "PRECAMPAÑAS"

Por: Pepe Morales y Sánchez Hidalgo

Arrancaron las campañas que buscan la presidencia de la República, aunque hay que decir que en estos momentos son sola y estúpidamente "precampañas", en una de esas ocurrencias que tiene el sistema político electoral de este pobre país, porque resulta idiota pensar --a estas alturas del partido-- que el PRI quite a Meade o lance otro gallo, cuando ya el bendito dedo elector lo ha señalado y el resto de los aspirantes se han conformado con chiflar en la loma y esperar que el dizque candidato "ciudadano" los llame a colaborar con él, si es que gana. Aún más absurdo es pensar que Morena ponga a otro candidato en lugar del eterno López Obrador, lo cual suena ridículo.

Cómo sea arrancaron ya las campañas o precampañas y con ellas se viene una andanada de spots en radio, televisión, internet, publicaciones escritas, redes sociales, espectaculares, calcas, posters, pendones colgados en postes y otros medios de comunicación, con un costo ultramillonario que Usted y yo amable lector pagaremos religiosamente con nuestras aportaciones vía impuestos y sin que nos hubieran preguntado. De hecho ya comenzaron y cuando digo costos ultramillonarios, basta con ver los topes de campaña que aprobó sin despeinarse y que le subiera el rubor a los cachetes la pomposamente llamada "Comisión de Prerrogativas y Partidos Políticos del INE" y cheque Usted nada más estas pornográficas cantidades: para presidente de la República se les puso un tope de "precampaña" de 67 millones 222 mil 417 pesos por candidato y para la "campaña" --no confundir-- la bicoca de 429 millones 633 mil 325 pesos ¡por candidato!

El dinero a la basura

Pero aún hay más dijera aquel mal recordado taradito tarador que era Raúl "Delasco", para el caso de los diputados federales el tope para cada uno de estos dilectos y "queridos" ciudadanos es de 252 mil pesos para la precampaña y un millón 432 mil 111 devaluados bilimbiques por candidato. ¡Son chingaderas y perdón por la palabra! Para los senadores, dependiendo el sapo es la pedrada, pero para los candidatos nayaritas el tope de precampaña será de 672 mil 224 y de 4 millones 296 mil 333 varos en la campaña; pero los candidatos de la ciudad de México tienen un tope para la "pre" de 4 millones 481 mil 494 pesos y la campaña de 28.6 millones. Sume usted amable lector y que no se le haga nudos el intestino delgado.

Mientras tanto las universidades públicas están en la quiebra, los maestros federales y estatales sufren por la incertidumbre de los aguinaldos, las escuelas preescolares, primarias y secundarias sin pupitres y a veces sin techo como en las localidades indígenas; 14 millones de mexicanos en pobreza extrema de esa que no saben qué van a comer al rato; miles de damnificados todavía en todos lados durmiendo a la intemperie; los pueblos sin agua, sin luz, sin caminos sacacosechas; los hospitales ni a curitas llegan y en general los servicios públicos de pésima calidad y en algunos casos de tercer mundo. Los centros educativos sin internet y la cultura o el deporte si acaso "hay" les dan las migajas de los presupuestos...

Escuela indígena

Y lo que más coraje da es que todos los candidatos, todos los que habrán de buscar uno de los 3326 cargos que habrán de renovarse este 2018 hablan de sacar al país, a sus entidades o municipios de la pobreza, de cuidar el gasto, de presupuestos y gastos austeros, de combate frontal a la corrupción e impunidad, de cambios, cambios, cambios...

Al momento de escribir estas líneas estoy esperando que la Universidad nos deposite la quincena y nos llega el comunicado que el Consejo General Universitario de la UAN aprobó un punto de acuerdo para la obtención de un crédito con el gobierno del Estado por 251 millones para cubrir las dos quincenas de diciembre, los aguinaldos y prestaciones pendientes. Esto es solo un curita porque el problema de las universidades públicas es grave y porque el gobierno federal alega que no hay dinero, es más, a la plantilla de docentes del nivel medio superior de la UAN, la SEP no la reconoce y se ha convertido en una carga para las finanzas universitarias que tienen que tomar el dinero para pagarle a catedráticos del monto destinado a la operatividad de la máxima casa de estudios...mientras eso sucede, los candidatos recorren alegremente el país a costa de nuestras costillas y dilapidando los billetes en anuncios de televisión o carteles adosados a postes y paredes...diciendo a cada paso: PENDEJADAS... ¿o no?