Pío Francisco Quintero Alduenda |
Hay niveles…
Héctor Algarin
…Y estúpidamente pensé, hasta este pasado fin de semana, que los recuerdos y anécdotas eran los pilares que sostenían mi relación con el lugar donde nací.
Acabo de aprender una de las lecciones mas dolorosas de mi vida, no sabía el verdadero significado del llamado “lazo de amistad” entre las personas…ahora, ya lo sé.
Este fin de semana, no solo enterramos al amigo…con él se fue parte de mi esencia, sé que los recuerdos se quedan; son tantos y tan variados que resultan innumerables y el solo intento de recordarlos…me llevaría toda una vida, y esta, ya me di cuenta, de lo efímera e incierta que es. Pero mas allá de lo anecdótico de los recuerdos es (trato de enmarcarlo) el hecho mismo de nacer, vivir, convivir y morir…pero ver morir al amigo con el que hiciste todo eso no encontraría las palabras adecuadas y correctas para expresarlo.
“El descansa en paz”, “Adiós amigo”, “Hasta luego”, “Nos vemos al rato”… ¿será suficiente?, ¿es lo correcto?, ¿lo dije bien? La verdad no me importa…los sentimientos no se expresan con palabras, no hay vocablos suficientes para manifestar el sentimiento.
Pepe, Cecilia, Héctor, Gaby, Pío Francisco y Gaby |
0 comentarios:
Publicar un comentario