Dr. Saulo Lora.
Presidente Municipal
Acaponeta
El asunto de esta carta es para pedirle a usted que renuncie de inmediato y con carácter de irrevocable al puesto de elección popular que el pueblo le confió. El motivo y razón de mi solicitud es que usted no cumple con lo que le juró al pueblo cuando tomó posesión del cargo de presidente municipal, tras casi doce meses de ostentar el cargo es evidente que usted desconoce las responsabilidades y obligaciones de su encargo, aun si las conociera, su falta de compromiso le ha impedido cumplir con lo que le juró a la sociedad. La ley Municipal para el Estado de Nayarit le marca a usted como principal y primordial obligación, la de proveer de manera continua los servicios públicos de Agua Potable, Alumbrado Publico, Seguridad Publica y Recolección de Basura, sin embargo, usted a confundido sus obligaciones, sin darse cuenta que la principal razón por la que está en el cargo, es para que se asegure de que cuando los ciudadanos abran la llave del agua, ésta fluya siempre y a todas horas, las patrullas ejecuten rondines constantes y el camión recolector pase puntual por todas y cada una de las esquinas. Sin embargo, usted y sus colaboradores han malgastado el tiempo explicándole a la ciudadanía el por qué no pueden, cuando deberían estar explicando el como si lo van a resolver. En éste tiempo, usted sólo se ha dedicado a desperdiciar los cada vez más escasos recursos, despilfarrandolos caprichosamente en sostener en la nómina a sus concuños y a sus muchos correligionarios de campaña, en hacer fiestas para festejar su cumpleaños, en viajes absurdos e irrelevantes al extranjero, en subsidiar de manera grotesca e irresponsable la ineptitud de Catón al frente del OROAPA, quien lejos de resolver el severo problema de escasez del vital liquido, se ha convertido el mismo en una fuga, pero de dinero. Es vergonzante observar como en lugar de atender su encomienda, usted se ha encargado, con su falta de liderazgo, de convertir el cabildo en una cena de negros, donde las ideas no brillan, opacadas por los chismes y mitotes de sus subalternos. ¿En donde quedaron sus promesas de Campaña? ¿Donde están las audiencias publicas que prometió? ¿Donde están las juntas en los barrios? Todo se le ha ido en renegar de que la gente pobre y necesitada le aborde para pedirle unas monedas. Esa muina suya es la que le impide visualizar alternativas, no solo para incrementar los ingresos de la tesorería, sino para impedir que sus colaboradores estafen los cobros de multas y licencias, el cobro de los servicios de seguridad prestados a las casetas de la autopista o los ingresos por concepto de cuotas por el servicio del agua potable. Si alguna de las razones que esgrimo le parece falsa, lo exhorto a que presente públicamente, como es su obligación, la documentación necesaria y exhaustiva que avale su proceder. Con mucho que agregar, pero sin ánimo ya de extenderme más, quedo a la espera de que haga usted uso del valor civil que le quede y presente su renuncia en breve.
LEC MF Anuar Abud
Enviado desde mi oficina móvil BlackBerry® de Telcel
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