PASIÓN POLÍTICA

SE MOFAN DE LAS AUTORIDADES DE SAYULILLA

Por Anuar Abud

Legitimas son las solicitudes presentadas al alcalde de Acaponeta por parte de las autoridades electas de Sayulilla los C. Nefertari García, presidenta del comité de acción ciudadana y el C. Dionicio Valadez, juez auxiliar en dicha población. Las demandas ciudadanas presentadas por los pobladores de Sayulilla encuentran sustento en los art. 4to y 125 de la Ley Municipal para el Estado de Nayarit, mismos que a la letra dicen: ARTÍCULO 4o.- El objeto y fines de los Ayuntamientos de los municipios del estado serán, entre otros: I. Promover el desarrollo económico, garantizar el bienestar y la seguridad de sus habitantes en el marco de una convivencia armónica y respeto a la ley; II. Garantizar la prestación, funcionamiento y administración de los servicios públicos de su competencia; III. Propiciar mediante el trabajo, la solidaridad, unidad e identidad de los habitantes y vecinos, garantizando su participación cívica y cultural… ARTÍCULO 125.- Los Ayuntamientos vigilarán que los servicios públicos se presten en igualdad de condiciones para todos los habitantes del municipio, en forma permanente, general, uniforme, continua… El alcalde y su equipo de trabajo, lejos de buscar una interpretación legal, social o política de las solicitudes ciudadanas por parte de los sayulenses, simplemente las desestiman, zafándose por la fácil y mofandose de ellos, llamando “chismosos” a los ciudadanos que educadamente y con gran valor civil le solicitaron una audiencia pública a fin de entregarle un escrito donde plasman las solicitudes en cuestión. Es claro que no tiene madurez politica ninguno de los miembros del gabinete municipal, toda vez que no encuentran solución politica a las demandas de los cudadanos, lejos de representar a la sociedad en general, se concentran en representar y apoyar a los correligionarios, a los amigos y a los parientes, lejos, muy lejos de lo que es el oficio politico. La falta de madurez politica queda de manifiesto tambien cuando en lugar de rodearse de buenos ciudadanos que lo asesoren politicamente para lograr acuerdos, contratan amanuenses mercenarios y porros sin oficio para que agredan, denosten y calumnien a sus adversarios. Valdría la pena parafrasear al Lic. José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo: "Que mal estamos, Calígula hizo cónsul a su caballo, nosotros hacemos funcionarios a los burros"