NO HAY NADA NUEVO BAJO EL SOL

Por: José Ricardo Morales y Sánchez Hidalgo

Si hemos de ser sinceros, no hay nada nuevo bajo el sol. El viernes por la mañana, la dirección de comunicación social de la presidencia que encabeza el Sr. Humberto Arellano Núñez, convocó a una conferencia de prensa donde representando al primer edil estuvo el Secretario de Gobierno Prof. Manuel Fernando Flores Tejeda, acompañado por el tesorero Contador Fabio Alejandro Gómez Varela; el Director del OROMAPAS, Ing. José de Jesús Pérez Ramos; el Contralor Prof. César Guadalupe Cedano Sánchez y el titular de la Dirección de Planeación y Desarrollo, Ing. Julio César Montes Vizcarra, los cuales uno a uno fueron dizque informando sobre los dizque resultados del proceso de entrega-recepción, y a mi muy particular juicio, mostraron que son un gobierno novel y lo peor, ñoño.

Cuando digo que no hay nada nuevo bajo el sol, es porque eso que ellos hicieron en un –perdón por la insistencia—dizque informe transparente y moralista, ha sucedido una y otra vez, y por supuesto no me refiero a la conferencia de prensa, que esa sí resulta inédita, aunque no original. Pero cada presidente que deja el puesto, antes de que pase un mes, suelta el gazapo diciendo que el anterior gobierno dejó enorme e impagable deuda.

He tenido la fortuna de ser integrante de tres administraciones municipales distintas –esto de fortuna, es porque en esos lapsos hice muchos amigos, conocí por dentro el manejo de una administración municipal y aprendí de primera mano los graves problemas del municipio y sus alternativas de solución, que por cierto no son simples--, dos con Efraín Arellano Núñez y una con Malaquías Aguiar Flores, quienes amablemente me invitaron a trabajar con ellos: en dos ocasiones en la dirección de comunicación social, una en la coordinación de transparencia y dos años que estuve en la dirección de fomento cultural y Casa de la Cultura.

Puedo decir que cuando el siempre bien recordado amigo Santos Díaz Mendoza, que en paz descanse, deja el poder en manos de Efraín Arellano “El Gallo”, este se encuentra con un gobierno casi en ruinas; ahí se habló, como siempre de la necesidad de un “programa de austeridad en el gasto”, “de apretarse el cinturón” y frases así que hemos venido oyendo los mexicanos desde que nacimos. Al salir “El Gallo” tres años más tarde, entra un gobierno de transición con el estimado Dr. Saulo Lora Aguilar y vuelta a lo mismo, ellos dicen que reciben gran deuda y enormes problemas por resolver y, luego de las consabidas frases de “cuidar el gasto” y “ser responsables”, trabajan por los siguientes tres años. Salen el médico Saulo y su equipo para entregar la estafeta otra vez a Efraín Arellano y todavía fresca en la memoria está el penoso momento cuando los proveedores locales regresan al presidente saliente a la sala de cabildos para reclamarle los pagos pendientes, que tocan pagar a la administración gallista, quien vuelve a decir que el gobierno está en ruinas y difícilmente se podrá trabajar. Sale Efraín y entra Malaco, y vuelta a lo mismo, un desorden en las finanzas y la casi quiebra del sufrido Ayuntamiento. Ahora la historia se repite por enésima vez, deja Aguiar Flores la silla y su sustituto “El Beyto” Arellano, suelta a sus funcionarios en irregular conferencia de prensa para decir lo que los ciudadanos sabemos de memoria: “no hay dinero y estamos en ruinas por culpa de…”

Diría yo: “Ya chole con esa cancioncita”, ¿fueron tan ingenuos que pensaron que llegaban a gobernar Bonanza o Shangri-La? ¿Creyeron como muchos creen que el Ayuntamiento tiene un barril mágico del que si sacas un billete de cien, aparecen varios de quinientos? Señores funcionarios, Profe Freddy, Contador Fabio, Profe César, Inge Pérez Ramos, Inge Julio César, les pregunto: ¿no sabían en realidad acerca de las carencias del municipio? ¿Entonces por qué con tanta efusividad y rabioso entusiasmo buscaron gobernar este cuatrienio, al grado que fueron capaces de arrojar la camiseta del PRI al cesto de basura y se vistieron la de Morena, así nomás porque sí?

Me extraña que varios de ustedes, siendo arañas, salgan ahora con que “a Chuchita la bolsearon”, ya que Freddy fue director del deporte, César Cedano ya tuvo una regiduría, el Contador Fabio, lleva dos administraciones en la tesorería, tres con esta; Pérez Ramos estuvo en Conagua, así que sabe de las privaciones y broncas en el área hidráulica y el Ing. Montes Vizcarra fue Director de Coplademun. Entonces, ¿por qué tanto brinco estando el suelo tan parejo?

Digo que muestran su condición de ñoños –noveles no, porque ya vimos que sí tienen experiencia--, ya que mucho de lo que expresaron fue con el evidente y malsano objetivo de desinformar y confundir a la ciudadanía, y lo peor, de echar toda la culpa a Malaco (no sé por qué causas), son verdades a medias o informes no precisamente exactos y me explico.

Se arrancó primero Pérez Ramos, quien con gesto adusto suelta que recibió una deuda de un millón y medio de pesos y, vuelta a lo mismo, la idea de no poder sacar adelante los problemas con ese enorme compromiso, dejando en la mente de los ciudadanos que no tienen agua en sus válvulas caseras, de que la administración anterior es el maldito origen de todos los males. Déjeme decirle amigo Pérez Ramos que el OROMAPAS que recibieron en su momento Malaco, Ramírez Filippini y Soto Díaz, fue mucho mayor que esa y sacaron el trabajo o por lo menos se hizo el esfuerzo porque el agua no caía en los aljibes por muchas circunstancias, a veces por mala suerte, en ocasiones porque la naturaleza no fue pródiga. Usted y yo sabemos estimado Ingeniero, que el problema del agua en la ciudad de Acaponeta es enorme, gigantesco y necesita un proyecto magno y muchos millones de pesos, para más o menos poder llevar agua a los domicilios de los usuarios. Qué mal que hicieron creer a cientos de acaponetenses durante la campaña, que entrando ustedes se iba a resolver el programa del agua potable y el drenaje como si llevaran bajo la manga la varita mágica del Mago Merlín. Ahora cobran su dimensión exacta los corifeos prosaicos, corrientes y vulgares, que durante tres años estuvieron sistemáticamente como cuchillo de palo, jodiendo a cada minuto en las redes sociales a la administración anterior por todo: agua, drenaje, zancudos, baches, focos fundidos, seguridad, y hasta por las moscas que pasaban volando; hoy los problemas son los mismos, y esas voces, tan enjundiosas y flamígeras que ustedes solaparon y en triste complicidad alentaron, han callado de manera ominosa, simple y llanamente porque ya, de algún modo, se han enquistado en el gobierno actual.

No es lanzando pullas, ni buscando culpables como habrán de solucionarse los conflictos, ni que hubiera sido Malaco el que desviara el río para que las galerías filtrantes quedaran en medio del cauce y Malaquías no es culpable de que cientos de ciudadanos, cerca de un 50% de los usuarios no paguen el agua, o que las tuberías del drenaje daten de 1968; no señores, mejor citen a una conferencia de prensa anunciando que ahora sí, sin varitas mágicas ni chisteras milagrosas, están integrando un proyecto que contemple la búsqueda del agua y no a orillas del río solamente, sino en toda la geografía municipal, verdaderamente hídrico y definitivo.

Siguió el Contador Fabio Alejandro, exponiendo que la tesorería registró, en este proceso de entrega-recepción, un adeudo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) de 6 millones 964 mil pesos correspondiente a los derechos por descargas de aguas residuales. Olvidó decir el flamante tesorero, que esos adeudos datan de hace decenios, que nunca ayuntamiento alguno hizo algo realmente significativo para pagar esos derechos o al menos comenzar a abonar y que, tocó a Malaquías Aguiar y a los integrantes del organismo del agua, recibir las amenazas de Conagua de suspender todo apoyo si no se pagaban los atrasos. Aquí hay que explicar que el gobierno federal, también siempre en apuros, decide a su vez amenazar a este tipo de dependencias como Conagua, con buscar sus propios recursos so riesgo de cortarles a ellos mismos la llave de los presupuestos; así que como en ruleta rusa, toca la mala suerte al 40 Ayuntamiento de hacer frente a ese toro y logra, con gran éxito por cierto, que les reduzcan buena parte de la mencionada deuda y hacer un acuerdo para comenzar a pagar, cosa que se hizo y ahora se olvida. También se hace mención, siempre con el dedo acusador de “Fue Malaco”, que hay una serie de demandas laborales en su última etapa procesal y la amenaza de un juez federal de embargar cuentas bancarias, vehículos, maquinaria y bienes muebles del Ayuntamiento si no se pagan 15 millones –nada más y nada menos--, así como la reinstalación inmediata de los trabajadores que demandan. Nadie recuerda ahora que esos laudos le llegaron a Malaco de administraciones anteriores, algunas que casi de manera dolosa dejaron que las demandas crecieran y no fueran atendidas en su momento y que, como muchas cosas, tiene que pagar el gobierno en turno. Resulta increíble, y de doble moral, que algunas de esas demandas fueron hechas por gente que hoy son altos funcionarios de la actual administración y ellos, esos que hoy acusan, saben quiénes son. Queda de tarea.

Hay que decir también que este es un monstruo que los propios gobiernos gestaron, alimentaron y vieron crecer, un enorme Frankestein que en forma de basificaciones a diestra y siniestra otorgaban de manera irresponsable a quienes ayudaron y más gritaban en las campañas electorales. Es el Ayuntamiento un globo al que le meten y le meten aire y que irremediablemente tiene que tronar. Dice al respecto César Cedano el Contralor, que recibió una nómina de 473 trabajadores que representan un costo mensual de 4 millones 014 mil pesos; pero insisto, ellos ya lo sabían y son los mismos que recibió el 17 de septiembre de 2011 el amigo Malaco Aguiar.

Recuerdo, cuando fueron a la oficina de Malaquías, algunos de los que hoy integran el nuevo gobierno, para dar inicio al proceso de entrega-recepción, mucho se platicó sobre el tema de los trabajadores, su número, los jubilados, los sindicalizados, los de confianza y lo que les esperaba, yo estuve ahí y así lo escuchamos y comentamos todos, por supuesto la parte que representaba a Humberto Arellano, quien estando ahí presente en esos momentos como presidente electo, la actual síndica Profa. Alma, el Profesor César y otros coordinadores de esa tarea.

Cerró la tanda el director de Coplademun, Ing. César Montes más conocido como “Chilapa”, al cual los vecinos de la calle Querétaro y algunas otras vialidades lo recordamos todos los días cuando caminamos por esas dizque banquetas, que más parecen Reino Aventura o una brecha del terror, donde se ganará un premio aquel que no se caiga de hocico en una de esas bárbaras inclinaciones de las rampas de estacionamiento, jorobas infernales y las que dejaron supuestamente para las personas con discapacidad. En particular puedo decir que se “le quiere y estima” en la Casa de la Cultura, porque nos prometió una rehabilitación tal, dijo en esa ocasión, que seríamos el orgullo de la nación, hoy, esa obra como dicen los chavos “chupó faros”, se llueve más adentro que afuera y las preciosas ventanas de huanacaxtle que nos prometió, se pudrieron en un par de años, ninguna ventana o puerta cierra bien y otros detallitos que ya le tocará ver personalmente. Habló el Ingeniero Montes, de muchos otros adeudos y se hartó de decir que la administración anterior había dicho falsos y mentiras al por mayor, sobre todo en las obras que quedaron en proceso, pero lo bueno es que el Secretario de Gobierno ya dijo que la comisión de recepción entregará a cabildo el dictamen de todo lo anterior para que este a su vez informe a la Auditoria Superior del Estado y a la Contraloría Estatal para deslindar responsabilidades y, ahora sí, que pague el que tenga que pagar, que le pisen la cola al que la traiga larga, sea quien sea.

De algo estoy seguro y esto aprendí a mi paso por la administración municipal, no ha habido en la historia de los 40 ayuntamientos que han gobernado desde 1917 cuando tomó el gobierno municipal Don Miguel Romero, el primero de 64 presidentes que han gobernado, un gobierno perfecto, ni lo será el 65 que le toca ser a Humberto Arellano Núñez; sí, los ha habido desastrosos y otros muy buenos, pero ninguno perfecto. Qué bueno digo que esta administración que apenas cumplirá un mes de vida, se encargue de manifestar ante las instancias correspondientes si hubo latrocinios o negligencias en la gestión municipal anterior o las anteriores y si resultan culpables que paguen, porque los ciudadanos estamos hasta la madre de esos desaguisados y de que la impunidad campee por todo lo alto. Sin embargo, muchos de nosotros no creemos ya más esos arranques de moralina, que buscan ocultar bajo el pretexto de no hay dinero o tendremos que utilizar los pocos recursos que existen para pagar esas deudas, una penosa incapacidad…no señores no les queda y solo demostrarán insolvencia para la tarea enorme y difícil de gobernar.

Para finalizar diré que esta acción me parece a mí que fue dictada desde las alturas, haciéndoles ver que eran gobierno de Morena, que olvidaran su pasado priista y que deben de actuar como tales, morenos hechos y derechos y que como tales deben señalar, acusar, si es preciso deshonrar hasta donde tope, o bien actuar como hacían los romanos: “difama que algo queda”.

Una pregunta más: ¿no hubiera sido mejor que primero se informara a los representantes del pueblo, o sea, a los regidores y a la síndica, antes de soltar los demonios a la prensa?

Mejor ponernos todos a trabajar cada uno desde su trinchera, dejar la grilla, que no la política, para mejores momentos –si es que los hay--, ya que gobernantes y gobernados queremos un Acaponeta mejor y por la senda del progreso.